estación, fuente de verdad

El sábado pasado, tipo 16 hs estaba en la estación de tren: no tenia ganas de esperar el colectivo, que me dejaba más cerca del destino, pero tarda mucho más en llegar y a todo esto tenía unas inmensas ganas de caminar esas 6 cuadras (aprox.) que caminé.
Me gusta viajar en tren porque si o si hay que observar, no sólo por el placer que me causa invetar historias acerca de la gente que veo, o el porqué de esas caras largas, sino porque hay que mirar para sobrevivir, para llegar sanos y salvos a casa.
Muchas de las historias (o pensamientos) me surgen en las estaciones del tren, cuando veo imágenes como la de arriba. Era un hombre (o una mujer, no le vi la cara muy detenidamente) totalmente hundido en la miseria. A modo de zapatillas usaba retazos de tela polar pegados con cinta, muchas cosas superpuestas a modo de ropa y abrigo, y un raro morral. Lo observé detenidamente, lo primero que me dije fue: ¿qué habrá hecho este hombre para merecer vivir asi? Seguí mirándolo, entónces la pregunta cambió: ¿qué NO habrá hecho para estar viviendo así?
A lo que apunto: quizá sí, sufrió una mala racha. Al principio la caridad le sirvió, quien dice que se llego a sentir cómodo asi como estaba. Alguna alma bondadosa hasta le habrá ofrecido trabajo, el que obviamente no acepto. Así de a poco la situación va emepeorando, la caridad no fue para siempre, se esfumó, asi como nada. Quedó desamparado.
La historia habría sido muy diferente si su culo se hubiese movido para conseguir su propio pan, con su sudor, son SU trabajo, y hoy por hoy, sus pies no pasarian el frio que pasan, sus manos podrian sentir el calor de una persona que lo acompañe, sus ojos mirarian a un futuro mejor.
En fin, es mi opinión, quizá sólo está meado por un mamut transgénico de inmenso tamaño.

ojos de ayer y hoy

Son siempre los mismos ojos, lo que cambia es lo que me rodea, y porqué no también mi forma de ser. En definitiva soy quien siempre fui, pero fui forjando mi caracter, mis modos de hablar o escribir.
Cambiaron muchas cosas desde la foto, pero otras siguen totalemente igual. Mis ojos no saben mentir, aunque simulen desentendimiento a veces, aunque se desvien por no querer ver la verdad, por no querer enfrentarse a esa realidad que se les presenta.
Mi mirada puede decir muchas cosas, como la de todos:
Miren y observen detenidamente y verán que soy la misma de hoy:
la que agacha la cabeza cuando esta atemorizada, la que achina los ojos cuando está feliz, aquella que cuando necesita irse a la mierda los cierra y vuela más allá de su realidad, soy esa que para seguir llendose mira siempre por la misma ventana todas las mañanas, aquella que camina y cree verlo todo.

la tormenta va pasando

Quiero estar al borde de rio,
ver como pasan los miles de litros,
quiero mirar el cielo y no ver polución.
Ya estoy más relajada,
ya estoy un poco más equilibrada...
ahora sólo necesito que la paz me rodee,
para terminar este proceso.

Todos cargamos mochilas en nuestras espaldas, todos los días: las pequeñas piedras que vamos poniendo en ella, son nuestro problemas. La mochila es cada vez más y más pesada. Cuando hacemos catarsis, la vamos vaciando. Nunca queda vacia como el primer día, podemos simular que si, perotodos sabemos que NO es asi.

Muchos se creen que olvidandose del problema que los atormenta, simplemente ya no lo tienen. No es así. Todo vuelve a la superficie, quizá pase mucho tiempo, pero les firmo un papel acá que tarde o temprano todo resurge, TODO. Yo soy una de esas personas que no olvida facilemente sus problemas, a menos que estan resueltos de la mejor manera posible, obviamente que siempre van a quedar cabos sueltos, pero bueno, es lo que hay...

Es increible como una frase, un gesto, una palabra, un abrazo, algo que parece insignificante nos cambie tanto. Lo que me inquietaba, era negro NEGRO, le hechamos blanco y ahora quedó un gris para nada desagradable... No suelen gustame los grises, pero por ahora está quedando bueno, espero poder llegar a lo más blanco posible, pero necesito tiempo y agallas. Igual sepanlo, lectores, que saben más de mi vida que la gente que me rodea todos los fucking días.

Moraleja: Ella siente, Uma escribe. Ella calla, Uma escribe.

so many voices, so many choices

Despues de estar ausente, por motivos diversos, vuelvo en un estado más extraño que nunca.

Sé reconocer mis estados de ciclotimia constante, pero estos días fueron realmente graves, a esto le sumamos la impaciencia hacia X motivo y es cartón lleno ( BINGO! - gritó alguien del fondo).

Quiero que la gente que me rodea me entienda, peeerooo, ¿Cómo lograrían entederme si en verdad ni yo me entiendo? Quiero GRITAR, pero callar mis problemas. Quiero CORRER, pero caminar para poder seguir obsevando detenidamente. QUIERO estar sola, pero a la vez me encataría que esten mis seres queridos rodeandome y abrazandome. Quiero POCO, pero a la vez mucho... (sólo por citar algunos ejemplos)
Ven, no puedo pretender que me entiendan si apenas me entiendo yo, no puedo leerme, y mucho menos escucharme. No puedo saber qué necesito.

Imaginense dos Umas (a falta de una, ahora tiene que haber dos). Entre ellas una gran avenida de 10 carriles hiper-transitada, Uma interior le grita a la exterior para que ésta logre enteder qué carajo pasa. Pero cada vez que pronuncia palabra aparece un camionero, hijo de la gran... que no sólo tiene el camión hecho mierda y hace todos los ruidos posibles, sino que toca esa bocina mega fuerte que tiene. Por lo tanto, no hay la más minima posibilidad de counicación, no puede existir.
¿cómo saber cuál es el punto de equilibrio si nose siquiera cual es? Nose, esto de tener que estar equilibrada no es para náda fácil, siempre alguien va a terminar aplastado por mi subeybaja (nunca supe como escribirlo) emocional.

Espero que con el tiempo pueda encontrar el equilibrio que tanto estoy necesitando, espero poder irme pronto (lo estoy considerando seriamente) a un lugar donde poder meditar. Me pinta Europa.

ejercicio subconciente

-¿Qué pensas? Me dijo procupada Emma.
- Nose. respondí
- ¿Te pasa algo?- Se preocupaba cada vez más
- Nose.
- Hagamos un ejercicio- Apresuro su habla- Decime la primer palabra que se te venga a la mente.
- Standby.
- ¿La segunda?
- Off. (seguia teniendo fija la mirada al frente, perdida)

Y asi segui toda la tarde... de veras preocupante. Pero por suerte de a momentos reaccionaba y me reia sin parar, pero a los dos segundos, seria y perdida...
¿Que pasa Uma?

frio: nostalgia romantica

Llego el frío, al fin. Y con él, muchas cosas más.
Amo dormir tapada con 25 frazadas y con dos remeras a modo de pijama. Me encata llevar bufanda y guantes. Pero, cada uno le da un sentido a las cosas, y para mi el frio, definitivamente es para estar en pareja. Si, señores. Sentir el calorcito de ese abrazo especial (frase cursi) es la mejor sensación. Ni que hablar de los besos helados (hmmmmmmmmm)
Recuerdo que en mis épocas de noviazgo (wow! que lejanas que parecen!) me encataba estar emponchada a más no poder y tirarme en una plaza y estar bien bien juntitos. admito que más de una vez me quedé dormida, todavia nose como no me chorearon nada, pero no importa es otro tema...
No es que extrañe a mi "ex", ni nada por el estilo... sólo es que con el frio me pongo más pegote, más cachondita y con ganas de abrazar... si puediera los abrazaria lectores, pero hasta el día de la fecha es totalmente imposible hacerles llegar mis abrazos, asique abazo mi monitor. Avisenme si sienten mi calorcito (¿)
OK, si esto del frio tardio, la felicidad amorosa en standby, y el calentamiento global me pone MÁS idiota que de costumbre.

¿solo o acompañado?

¿Cuántas veces estamos rodeados de gente pero nos sentimos solos? ¿Cuántas otras estamos solos y nos sentimos más acompañados que nunca?

Me gusta estar en mi habitación, tirada en la cama con un libro en mano y dejar que mi mente solucione sus problemas. Reconozco que a veces lidiar con la soledad no es fácil, todos necesitamos del contacto humano...
Cuando salgo a caminar y miro, pensativa, a las personas que pasan a mi lado, siento que de alguna manera me acompañan, sobre todo aquellas que también me miran detenidamente (muchas veces me "divierte" pensar que entablamos un conversación que sólo yo y esa persona podemos escuchar... es idiota lo sé, pero me pasa). Soy de aquellas que les gusta caminar despacio y pensar en todas esas cosas que tiene para contar, mirar detenidamente cada detalle de lo que me rodea y sacar fotos con mi mente/ojos a esas imágenes que quiero guardar (con respecto a esto me pasa algo loco... saco esa "foto" y despúes cuando quiero recurrir a esos momentos mis ojos se cierran y los proyectan).

Cuando estoy inmersa en la masa que camina por Capital Federal, me siento una hormiga más... NO me gusta caminar por Capital, lo odio! Sólo porque tengo que seguir el ritmo que me impone la masa y no puedo observar como me gusta.

Conclución: ni estar todos los días solos, ni tampoco estar todos los días DEMASIADO acompañado. Hay que tener un justo equilibrio entre lo público y lo privado.

cataboom! (exploté)

Hay tantas cosas que tengo que contar... entre ellas que cada vez siento que me ahogan más y más.
suelo cargar mis penas sola, no me gusta sentir que cargo a los demás con ellas. Mis problemas son boludeces para la mayoria, a veces también lo siento yo, pero de todas formas me preocupo por esas pequeás cosas sin importancia.
Odio sentir que puedo con todo y que le tiempo me refriegue en la cara que no es asi. Despúes de varios intentos nóte que es humanamente imposible poder lidiar con todo (si hay alguien que pueda, por favor que me pase su receta mágica), siempre llega el momento donde nos quebramos... esos quiebres al comienzo pueden ser angustiosos, pero paradojicamente nos ofrecen una sensación de libertad muy especial, que ninguna otro momento de felicidad, angustia o furia nos puede brindar. Esos minutos/horas son tortuosos, y más con mi mente que no para de maquinar y de hervir. Hiervo tanto o más que el agua a 100 ºC (373 K - 180 ºF ), me presión aumenta al equivalente de la contenida en una olla a presión.
No puedo parar de recurrir al tema que me hiso explotar, no puedo seguir con lo que estaba haciendo y recurro al que está al lado, la mayoria de las veces Emma, para torturarla con mi bronca.
Una vez que "vomité" todo, soy libre como un pájaro en el cielo, como las hojas en el viento, como pensamiento al divino botón...

como hojas en el viento

Hoy mientas iba caminando a dictar mis clases a los enanos más lindos del mundo (6 y 7 años), miré atentamente las hojas que ya cayeron de los árboles gracias al otoño, que en temperatura todavía no llega.
Entre otras cosas observé atentamente el movimiento de estas hojas. Tan "dominables" por el viento.
Al toque mi volatil mente empezó a divagar, como de costumbre, obvio.

Nuestra vida es una mera consecuencia de nuestros actos diarios, de nuestras deciciones. Podemos tener todo planeado, pero si cambiamos un mínimo detalle, quizá el final que teniamos pensado cambió rotundamente. Entonces, el destino de las hojas, regido por el viento es azaroso, por lo tanto nuestro destino también es incierto.
Me gusta tener todo planeado y bajo control, pero lamentablemente no puedo hacerlo. Puedo pensar en lo que haré en un futuro, pero no puedo estar 100% segura de lo que va suceder. Me gustaría hacer/decir tantas cosas en el futuro, pero como nose si moriré mañana, asique capas mi cuerpo y mente se llevaran muchos pensamientos /actos.

A ustedes queridos lectores, son los pocos afortunados en saber los pensamientos que mi mente no se llevará y que muchos no tiene ni idea que están en mi.

¡Salud!